La biblioteca física y la biblioteca online son partes indispensables de una misma realidad, la biblioteca. Dos espacios que no deben estar ni separados ni diferenciados, sino que tienen que formar un único conjunto. Ahí es donde entra en juego el bibliotecario/a como profesional que tiene que hacer que esta unión sea una realidad. Sin duda que para ello tiene que dominar el entorno online / digital. Para ello debe tener una serie de habilidades digitales, conocer las (nuevas) funciones a realizar y liderar el espacio online al igual que lidera el espacio físico de la biblioteca con sus conocimientos en soportes analógicos y servicios y actividades presenciales.

Funciones que debe llevar a cabo el bibliotecario digital en la biblioteca

Las bibliotecas han ido asumiendo poco a poco, pero con paso firme, los procesos de automatización, la digitalización y preservación de colecciones, y su presencia online. Ahora tienen entre manos el reto del préstamo de contenidos digitales… y quizás en un futuro no muy lejano tengan que dar un nuevo empujón al aspecto tecnológico e incluir servicios basados en la Inteligencia Artificial. Sin duda que los avances tecnológicos no son ajenos al mundo bibliotecario. Avances tecnológicos que hacen que los bibliotecarios/as sean profesionales más preparados en este mundo que tiende a la digitalización de casi todos los aspectos de la vida personal y profesional, y de la cual se salva (por ahora) el libro impreso.

Sin duda que la tecnología y toda adaptación y evolución es de suma importancia en las bibliotecas. De suma importancia para centrar el foco de atención en las personas. Parece paradójico que el aumento de la tecnología haga que las bibliotecas pongan mayor atención en las personas… pero creedme, es así. Y es que las bibliotecas se deben a las personas, a sus usuarios, y deben tratar de ser lo más útiles posibles en su necesidades informativas y culturales. Necesidades que, y como no puede ser de otra manera, también hay que tratar de solventar de manera online de la mejor manera posible.

Es por ello por lo que el bibliotecario digital (el bibliotecario al fin y al cabo) debe tener una serie de habilidades y aptitudes en el desarrollo de sus funciones online. Habilidades y aptitudes como son el conocimiento de la tecnología a utilizar, la comunicación en red, la gestión online de la información, la capacidad de aprendizaje, el liderazgo digital… Todas estas capacidades para llevar a cabo, y desarrollar, funciones como el cuidado de la imagen digital, la gestión de redes sociales y del sitio web de la biblioteca, la referencia online a usuarios… A continuación expongo una serie de habilidades, aptitudes y funciones que los bibliotecarios digitales deben poseer y llevar a cabo.

9 habilidades y aptitudes que debe tener el bibliotecario digital

  1. Conocimiento tecnológico y digital. El bibliotecario digital debe conocer, utilizar y tratar de sacar el máximo partido a aquellas tecnologías (herramientas, aplicaciones móviles, nuevos soportes de lectura, plataformas de contenido digital…) que tengan mayor sentido para la biblioteca y su comunidad de usuarios.
  2. Comunicación en red. Debe saber comunicarse de manera efectiva a través de las distintas formas de contacto que ofrece Internet. Por supuesto que debe entender el mundo de las redes sociales y saber conectar con la comunidad de usuarios de la biblioteca.
  3. Coordinación y trabajo en equipo de manera remota. Debe tener capacidad para trabajar en equipo a distancia y de forma remota. Además debe tener capacidad para coordinarse, comunicarse y gestionar de forma eficiente los tiempos y recursos que tiene a su disposición.
  4. Actitud de servicio y orientación hacia el usuario. Uno de los objetivos finales de las bibliotecas es la satisfacción de las necesidades de los usuarios. El bibliotecario digital debe tener una clara vocación de servicio hacia los usuarios online de la biblioteca para satisfacer sus necesidades, además de informar y formar.
  5. Buen conocedor de la gestión de la información en red y pensamiento crítico. Debe tener capacidad de síntesis y de selección de la información en red para servirla a los usuarios de la biblioteca. Además debe diferenciar la información fiable de la que no lo es. También tiene que tener capacidad para la generación de contenidos que ayuden a la comunidad de usuarios de la biblioteca.
  6. Capacidad de aprendizaje continuo. El mundo online cambia muy deprisa, de ahí la importancia de la formación y el reciclaje profesional continuo. Debe tener ganas de aprender y adaptarse rápidamente a las nuevas formas comunicativas y de uso de los distintos recursos, plataformas y herramientas online.
  7. Autonomía, capacidad para tomar decisiones y resolver problemas. Debe tener capacidad de trabajo de manera autónoma, además de agilidad en la toma de decisiones y en la resolución de problemas que puedan tener lugar en red.
  8. Creatividad y capacidad para tener iniciativas. Para llegar a los usuarios de la biblioteca no queda otra que usar la creatividad y tener iniciativas que salgan de lo común. El objetivo es llamar y captar la atención de las personas para que se fijen en la biblioteca.
  9. Liderazgo digital. El bibliotecario digital debe tener capacidad de fomentar el trabajo en equipo y las colaboraciones en red. Además debe promover y facilitar la circulación de información tanto de manera externa como interna a la biblioteca.

Enumeración de algunas funciones que el bibliotecario digital debe llevar a cabo (entre otras)

  • Cuidado de la imagen y reputación digital de la biblioteca.
  • Gestión de redes sociales: Facebook, Twitter, Pinterest, blog, Whatsapp
  • Gestión de la página web de la biblioteca: posicionamiento, usabilidad, accesibilidad…
  • Gestión, creación, edición y publicación de contenido online.
  • Análisis de información web.
  • Servicio de referencia online.
  • Dinamización online los servicios de la biblioteca: préstamo físico, préstamo digital, actividades, noticias…
  • Fomento de la lectura, recomendación y acercamiento de nuevas formas y medios de lectura digital.
  • Formación a usuarios en la búsqueda de información online y en los recursos web de la biblioteca.
  • Defender la legalidad de los contenidos digitales y velar por el cumplimiento de la propiedad intelectual en sus acciones.
  • Digitalizar, preservar y difundir colecciones.
  • Creación y gestión de repositorios digitales.
  • Gestión de contenidos digitales y uso de metadatos.

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