Dos bibliobuses de la Diputación de Salamanca cuentan con un nuevo servicio: cajeros automáticos en los que retirar dinero en efectivo con tarjetas de cualquier entidad bancaria. Esta iniciativa fue puesta en marcha a finales del año pasado y su objetivo es combatir la desertización financiera de las localidades salmantinas.
Además de llevar la cultura a los municipios que carecen de biblioteca, dos de los cuatro bibliobuses de la provincia de Salamanca llevarán también dinero en efectivo a través de cajeros automáticos. De esta manera, cualquier persona podrá hacerse con dos bienes tan preciados en la considerada «España vaciada»: acceso a la información y al conocimiento a través del préstamo de libros y acceso a dinero físico para poder realizar compras.
«Además de llevar la cultura a los municipios que carecen de bibliotecas estables, como llevamos haciendo años, estos autobuses llevarán también dinero en efectivo para que los ciudadanos de la Salamanca rural, y especialmente nuestros mayores, que no pueden desplazarse a otros municipios, tengan acceso a un servicio tan necesario aún hoy en el mundo rural como es el disponer de dinero en efectivo», comenta Javier Iglesias, presidente de la Diputación de Salamanca.
Con el paso de los años, los núcleos poblacionales pequeños han visto cómo sus servicios se han ido reduciendo. Hecho que hace que las personas abandonen los municipios y, tras ese abandono, se sigan limitando más los servicios básicos como la educación, la sanidad, la cultura… El cierre de sucursales bancarias y la eliminación de cajeros automáticos también es un mal que afecta a las personas que viven en dichas localidades. Obligando a que se desplacen a otras localidades para poder sacar dinero y realizar sus compras cotidianas.
Bibliocajeros, bibliobuses con cajeros automáticos para llevar dinero en efectivo a la España vaciada
Los bibliobuses salmantinos que cuentan con cajeros automáticos recorren un total de 130 municipios. Con ello se quiere dar respuesta a una emergencia social a través de «un proyecto pionero y único en España, que va a prestar una administración pública, con un coste muy reducido, para ofrecer un servicio absolutamente necesario en el mundo rural». En un futuro se pretende llegar a los cerca de 200 municipios de menos de 500 habitantes que recorren en su conjunto los cuatro bibliobuses de la diputación. Y es que de los 362 municipios que tiene la provincia de Salamanca, 296 no cuentan con oficina bancaria.
Comentar que el coste de mantenimiento del servicio es de unos 18.000 euros al año y que su utilización tiene una comisión de un euro. Y que esta iniciativa es fruto de un acuerdo entre la Diputación, a través de su área de Cultura y delegación de Desarrollo Rural, y la compañía de logística y gestión del efectivo, Prosegur Cash.
«Desde Prosegur estamos encantados de participar en esta iniciativa que ayudará a combatir la desertización financiera en las comarcas salmantinas, una de las provincias más afectadas por la desbancarización en España, al mismo tiempo que nos asociamos a una iniciativa cultural que dinamiza y facilita el acceso a la cultura a estas localidades», destaca Benjamín Crespo, delegado de Cash Rural de Prosegur.
Fuentes: Diputación de Salamanca | Prosegur | El Confidencial |
«El coste de mantenimiento del servicio es de unos 18.000 euros al año y que su utilización tiene una comisión de un euro». Una vergüenza : el bibliobus da el servicio y el banco se lleva la ganancia.
Hola, Marta. Solo espero que este gasto no salga directamente de Cultura y se impute a Desarrollo Rural. Como siempre, las bibliotecas mirando por el bien de las personas.