Ya es posible acceder a más de 60.000 libros electrónicos en la Biblioteca Nacional de España y en las bibliotecas autonómicas gracias al depósito legal de publicaciones en línea, el cual entró en vigor en el año 2015. La Biblioteca Nacional de España ha recibido desde entonces más de 80.000 publicaciones electrónicas (normas AENOR, publicaciones oficiales y ebooks distribuidos por Libranda, e-Libro y UNEBook), por lo que el número de libros electrónicos irá creciendo según se vayan ingresando, procesando y cargando en el repositorio de acceso.

En 2015 se aprobó el Real Decreto que regula el depósito legal de las publicaciones en línea. Este real decreto desarrolla la Ley 23/2011, de 29 de julio, de Depósito legal, en la que se consideran por primera vez objeto de depósito legal los sitios web y las publicaciones en línea.

Son objeto de depósito legal todo tipo de sitios web y las publicaciones en ellos contenidas, siempre que contengan patrimonio bibliográfico, sonoro, visual, audiovisual o digital de las culturas de España.

Más de la mitad de los libros electrónicos ya se han procesado y están incorporados al repositorio de libros electrónicos. Dicho acceso y consulta se podrá realizar en exclusiva desde las instalaciones de la Biblioteca Nacional de España y las bibliotecas autonómicas a través de un visor seguro que impide las descargas ilegales. La finalidad de este modo de actuación es proteger los derechos de propiedad intelectual que afectan a estas publicaciones.

De esta forma se habilita para las publicaciones electrónicas un acceso en condiciones similares al que se ofrece para las publicaciones en soporte físico ingresadas por depósito legal.

Comentar que, a diferencia del depósito legal de obras físicas, el depósito legal de publicaciones en línea es llevado a cabo por iniciativa de los centros de conservación de las distintas comunidades autónomas y no por los editores. Y una curiosidad a tener en cuenta, no se le asigna número de depósito legal a los libros electrónicos.

Accede a las publicaciones electrónicas de la BNE desde la Biblioteca Regional de Madrid

Sin duda que es una estupenda noticia, pero puede dejar a gran parte de la población igual que antes de que sucediese. Es decir, no tendrán posibilidad de ir a la Biblioteca Nacional de España o a las bibliotecas autonómicas a consultar los libros electrónicos. Con la facilidad que ofrece Internet en cuento acceso a contenidos, esta se ve limitada por los derechos de autor. No digo que esté mal o sea incorrecto. Es lo que las bibliotecas tienen que hacer para respectar el buen uso de las obras con derechos de autor.